La interna entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof por el control del PJ volvió a tensarse apenas finalizó la sesión del Senado bonaerense de ayer, en la que se exhibió un entendimiento (con bemoles) que derivó en la media sanción de un proyecto para suspender las PASO en la provincia de Buenos Aires. En las filas del gobernador, se leyó como un ejercicio de presión sobre los intendentes que lo respaldan que, una vez cerrada la sesión, doce senadores que responden a la expresidenta hayan presentado una iniciativa para habilitar la reelección indefinida de legisladores provinciales y municipales, que excluye de esa posibilidad a los jefes comunales.
Mientras en el cristinismo justifican la iniciativa en la urgencia de los legisladores para levantar sus restricciones electorales y en la unificación de criterios con diputados y senadores nacionales, en el campamento del gobernador no dudan en considerar la movida un dardo contra los intendentes que se alinearon de ese lado de la grieta interna.
“Estaba el rumor [sobre la presentación del proyecto del cristinismo], en la lógica de extorsionar a los intendentes. [Están] enojados porque la gran mayoría está con Axel, públicamente, y muchos otros aún no lo pueden expresar”, afirmó a LA NACION un alfil del gobernador.
Otra fuente alineada con Kicillof en la disputa interna subrayó que el proyecto (que tienen como autor al senador Luis Vivona, jefe del PJ de Malvinas Argentinas) se debe a que “están buscando salvarse los que se les vence el mandato y, de paso, molestar a los intendentes por no acatar sumisamente las ideas de La Cámpora”. La fuente sostuvo que sabían “desde diciembre que estaban con esa idea [por el proyecto]”, aunque en otros sectores del grupo que apoya al mandatario provincial admitieron que la jugada los sorprendió.
“Es un apriete al gobernador. Es una picardía de La Cámpora y compañía ir por la reelección de todos, menos la de los intendentes. El mensaje es que, si quieren la reelección de los intendentes, paguen algún costo los de Axel. El tránsito hacia el cierre de listas va a tener estos vericuetos”, indicó un dirigente del conurbano que trabaja en el armado político del gobernador.
El proyecto de Vivona, que ingresó al Senado ayer a las 16.19, establece en su primer artículo modificar el artículo tres de la Ley Orgánica de las Municipalidades para habilitar la reelección indefinida de los concejales, pero mantener el límite para los intendentes. En el artículo segundo, se propone la modificación del artículo 13 bis de la ley 5109 (ley electoral de la provincia de Buenos Aires) para que establezca que “los diputados y senadores podrán ser reelectos” (hasta hoy, rige para ellos el mismo límite de dos mandatos seguidos que tienen los jefes comunales).
Desde el cristinismo, negaron que haya motivaciones contra el gobernador y sus intendentes detrás de la iniciativa. “Para nada, en absoluto”, indicó una fuente del sector. “El tema es que los legisladores, si quieren reelegir, se están quedando sin tiempo. Había que acelerar el tema y hay cierto acuerdo. Los intendentes andan a las vueltas, pero nadie definía. Y, además, tienen tiempo, su elección es en 2027. Se decidió avanzar con lo urgente. Por otro lado, si esto pasa, lo de los intendentes ya tendría un antecedente que habilita el tema”, explicó la fuente.
En otra terminal cristinista, justificaron el proyecto con otro argumento: “La idea es implementar el mismo rigor que con los legisladores nacionales. Ellos no tienen límites y acá sí había”.
En la Legislatura, Cristina pone en juego 15 bancas de diputados y senadores que le responden; Kicillof, solo siete. También, son más los legisladores alineados con ella que están impedidos de volver a presentarse por el límite de dos mandatos que rige en la provincia y se beneficiarían con la eliminación de las restricciones. “Más que eso, es una provocación a los intendentes y no tiene lógica política”, reaccionaron cerca del gobernador.
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Más de 40 jefes comunales apoyan a Kicillof. Entre ellos, algunos de sus principales armadores, como Jorge Ferraresi (Avellaneda) y Mario Secco (Ensenada), que no tienen posibilidad de reelección si no se modifica la ley.
Además de Vivona, firmaron el proyecto los senadores Gustavo Soos (hombre de confianza del intendente de Merlo, Gustavo Menéndez), Walter Torchio (exintendente de Carlos Casares), Eduardo “Bali” Bucca (exintendente de Bolívar), Emmanuel González Santalla (de La Cámpora de Avellaneda, enfrentado con Ferraresi), Teresa García (jefa del bloque), Adrián Santarelli (de Lomas de Zamora, alineado con Martín Insaurralde y Federico Otermín), Laura Clark (de Pergamino), Amira Curi (de La Cámpora de La Matanza), María Rosa Martínez (del distrito de Almirante Brown), María Elena Defunchio (de La Cámpora, del distrito de Nueve de Julio) y Daniela Viera (camporista, de Pehuajó, donde gobierna el intendente ultrakirchnerista Pablo Zurro).
El kicillofismo también mastica bronca porque la suspensión de las PASO aprobada el martes en el Senado provincial no incluyó la extensión de los plazos del calendario electoral que pretendía el gobernador, lo que le hubiera dado mayor plazo de anticipación a la convocatoria de elecciones, el reconocimiento de alianzas, la presentación de listas y de boletas. “Es una extorsión más, sin ningún tipo de racionalidad política. Inexplicable, como todo lo que están haciendo. No votaron la adecuación de plazos electorales para seguir embarrando la cancha”, consideró un dirigente leal al gobernador.
Otra fuente del grupo de Kicillof calificó de “trastada” la exclusión de la modificación de los plazos en el proyecto aprobado. “No aprobar los tiempos, siendo un pedido de la Corte [provincial] fue una maldad”, añadió. “La Provincia está haciendo una elección novedosa [al desdoblar y tener a su cargo, así, el operativo electoral]. El proyecto del gobernador daba más plazos para suplir dificultades. Lo hacen para demostrar poder y que la cosa no salga como quiere el gobernador”, planteó un hombre que camina secciones electorales con la bandera kicillofista.
La tensión entre los bandos volverá a medirse el miércoles, cuando desde las 15 la Cámara de Diputados bonaerense intentará convertir en ley la suspensión de las PASO que logró media sanción en el Senado.